
Los dedos sin quererlo/
quedaron enredados
en el juego sutil de las caricias
Los besos se perdieron/
en una maraña insinuante
de cabellos inquietos
Los suspiros se camuflaron/
imprudentes/
entre la brisa que agitaba
la llama
Los cuerpos se entregaron/
al desamparo
de la lujuriosa desnudez
quedaron enredados
en el juego sutil de las caricias
Los besos se perdieron/
en una maraña insinuante
de cabellos inquietos
Los suspiros se camuflaron/
imprudentes/
entre la brisa que agitaba
la llama
Los cuerpos se entregaron/
al desamparo
de la lujuriosa desnudez
1 comentario:
Me gustó. Muy sugerente y sutil. Me recuerda vivencias personales.No te conocia y ahora voy a visitarte seguido. Chau
Cristina Abalos
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